miércoles, 11 de mayo de 2011

Nada de perfección

Ya se que no tengo un cuerpo de miedo ni que soy precisamente una belleza, lo sé. Sé que hay días que ni si quiera yo me aguanto y a veces lo pago con los demás sin darme cuenta. Sé que no tengo un estilo propio a la hora de vestir, hay días que me gusta ir super arreglada y otros voy con lo primero que veo. Sé que soy demasiado romántica, aunque odio la palabra amor.Pero sé lo que es el verbo querer, y suficiente. Tengo mucho carácter, la vida me ha hecho así, continuas caídas me han hecho un caparazón, una simple fachada de dureza. Confío y desconfío con demasiada facilidad en la gente, tengo 1000000 defectos, pero también tengo 1000001 virtudes. Soy una soñadora, no me importa lo que digan, piensen o deduzcan de mi. No soy perfecta, soy una jodida humana. Además soy como los gatos, si caigo, caigo de pie. No soy de las que veras llorando por todas las esquinas, suelo ser bastante fuerte o al menos eso intento. He aprendido a callar las palabras, aunque todavía me queda aprender a callar al corazón que es un rebelde empedernidoinoportuno y chillón. Así que es normal que te sientas aturdido al principio, e incluso que te marees. Es normal que te cueste un poco seguir el ritmo y entender algunas cosas, es normal porque soy una montaña rusade esas que te ponen boca abajoboca arribaque te subenque te bajan y piensas "Joder  que pare" Soy extremista, o bipolar como quieras llamarme. Un día caeré a un pozo detristeza y soledad y al otro me verás subida al árbol más alto que hay en el bosque con una sonrisa de oreja a oreja. Puedo ser la persona más arrogante que conozcas por la mañana y por la tarde cambiar y ser la más dulce. Tengo mis días, al igual que mis sonrisas que dejan ciego y mis gestos que asustan. No me va eso de tener un término medio, o es blanco o negro. También te darás cuenta que estoy entregada al 100%, que si no lo hago bien me enfado. Que quiero alcanzar en todo momento la "perfección", aunque se que no existe. Pero a pesar de eso, también soy de esas a las que las acabas pillando el gusto y al final disfrutas. Incluso me arriesgo a apostar a que seré tu atracción favorita del parque de atracciones